domingo, 1 de marzo de 2009

Llevamos un par de días intentando contactar con Ángel Romero, cabeza visible de AVallekas Producciones, para escuchar su versión y aclarar este desaguisado, pero no quiere responder a nuestras llamadas ni mensajes a pesar de haber sido premiado por la Asociación de la Prensa de Cáceres por su buen trato a los medios. Quien sí lo ha hecho tras insistentes intentos por parte de EP ha sido su mujer Concha, que aparte de decir que produce Extremúsika "por amor y por dar un poco de dignidad a Extremadura", que somos nosotros quienes les ponemos a parir en los foros de Internet y en los periódicos, que somos unos lameculos del ayuntamiento de Cáceres, ha llegado incluso a amenazarnos con "partirnos la cara" si publicábamos este escrito. Hemos insistido en que nos explicara el por qué de la prepotente actitud de la productora pero, no ha sabido responder a esta cuestión aparte de unos cuantos insultos más y quejas sobre rivalidades políticas en los partidos y ayuntamientos que están detrás de ambos eventos.

Comienza la oleada de festivales musicales en Extremadura, y ya ha empezado el bombardeo publicitario y presentaciones de dos de los festivales que se van a dar cita en nuestra región en 2009: por un lado el ya tradicional Extremúsika, que este año tiene como novedad que se hace en Mérida tras la falta de acuerdo o apoyo con el ayuntamiento de Cáceres, y por el otro uno que se estrena con una susulenta aportación dineraria del Ayuntamiento cacereño, que está dispuesto a tirar la casa por la ventana, y nuestro dinero, con el asunto este de la capitalidad cultural europea: El Festival del Oeste.

Si tocas en Extremusika no puedes tocar en el Festival del Oeste. Esta parece ser la condición sine qua non de la productora madrileña Avallekas Producciones para los grupos que pretendan tocar en los dos festivales, que se distancian 60 km y más de tres meses entre uno y otro.

La polémica está servida y la guerra propagandística y publicitaria entre las dos compañías respaldadas por los ayuntamientos va a ser digna de mención, dura y despiadada en estos días que se avecinan antes del festival, ahora emeritense, Extremusika. Por ejemplo ayer, que se presentaba en Madrid el primer boceto del Festival del Oeste, salió unas horas antes una información de los nuevos fichajes para Extremúsika: Los Delinquentes, Tonino Carotone y Def con Dos ¿Casualidades de la vida?

Según cuentan algunos grupos sobre las condiciones que les está exigiendo Avallekas, aparte de la ya tradicional de no pagar a cada uno su correspondiente caché avalándolo con la también excusa tradicional de la promoción que supone tocar en este festival, es no tocar en el nuevo proyecto de festival programado para primeros de julio en Cáceres. A lo que algunos grupos están accediendo resignadamente.

Llevamos un par de días intentando contactar con Ángel Romero, cabeza visible de AVallekas Producciones para escuchar su versión y aclarar este desaguisado, pero no quiere responder a nuestras llamadas ni mensajes. Quien sí lo ha hecho tras insistentes llamadas ha sido su mujer Concha, que aparte de decir que produce Extremúsika "por amor y por dar un poco de dignidad a Extremadura", que somos nosotros quienes les ponemos a parir en los foros de Internet y en los periódicos, ha llegado incluso a amenazarnos con "partirnos la cara" si publicábamos este escrito. Hemos insistido en que nos explicara el por qué de la prepotente actitud de la productora pero, no ha sabido responder a esta cuestión aparte de insultos y quejas sobre rivalidades políticas en los partidos y ayuntamientos que están detrás de ambos eventos.

Según nos cuenta Alberto Casado, hasta ayer manager y miembro del grupo Los Niños de los Ojos Rojos, y quien ya tenía cerrado el contrato con Krea Música para el Festival del Oeste, dice que Avallekas anda diciendo a los grupos que la productora Krea Música contratada por el ayuntamiento de Cáceres, encargada de la primera edición del Festival del Oeste, está llamando a los mismos grupos que forman parte del cartel de Extremúsika y esto está siendo la clave de todo este desaguisado, pues según dicen en Avallekas no están dispuestos a aceptar que El Festival del Oeste sea un "clon" de Extremúsika. Romero por lo visto ha dicho a algunos grupos consultados por este medio, que si tocan en el festival cacereño, no lo podrán hacer en el emeritense Extremúsika, y esto está creando un tremendo desconcierto y perjuicios importantes a managers, representantes, grupos y músicos.

Por si no teníamos suficientes caciques manipuladores en esta tierra, ahora vienen los de Avallekas a enmendarles la plana y a hacer lo que le sale de los mismísimos con los grupos musicales para perjudicar al que parece ha declarado su enemigo y plagiador del subtítulo del originario Extremúsika, que también se llamaba hace unos años el Festival del Oeste, como si también ellos tuvieran derecho sobre las palabras Festival y Oeste. Mucho nos tememos que esto es cosa del Ayuntamiento de Cáceres, que es quien parece ser que está manipulando a todos movido no sabemos exactamente por qué intereses, pues según asegura Casado, quien hace tiempo se viene quejando de la manipulación propagandística que hacen los políticos de la gente de la cultura: "gracias a estas cositas y a estos mercachifles de la cultura acabo de perder miles de euros, muchos años de duro y sacrificado trabajo, y mi capacidad como manager del grupo que yo mismo creé: Los Niños de los Ojos Rojos".

En la otra parte del cuadrilátero, Ismael Abad, representante de Krea música y músico del grupo Barba Roja, ha dicho que a él no le importa que los grupos toquen en otros festivales, pues estos tienen que ganarse la vida y a ellos no les importa que se repitan grupos en los mismos carteles. Que le parece absurdo.

Llegados a este punto, irracional y esperpéntico donde los haya, ya que los festivales están muy distantes entre ellos, no comprendemos el empeño de Avallekas en competir empresarialmente de esta manera tan insana y poco ética, y menos utilizando de esta menera a los pobres grupos, que a duras penas se mantienen y pagan sus impuestos con la crisis, que han visto rebajado sobremanera su número de conciertos o cuyas productoras han tenido que cerrar por quiebra ante la caída de su volúmen de negocio. Imaginamos que la mayoría de los grupos afectados no quieren saber nada de estas rencillas entre grandes productores y lo que quieren es tocar el mayor número de conciertos posible y promocionarse.

Casado asegura que ha sido él mismo quien llamó a Krea para ofrecer a su grupo, y que en ningún momento Krea le llamó para ofrecerle el festival ni rebajarle el caché para poder participar en el Festival del Oeste, sin llegar a pensar que las cosas se iban a poner tan complicadas como se han puesto. Entendemos que Avallekas pueda tener potestad sobre los grupos que representa y con los que tenga contrato de representación, pero no sobre los que contrata eventualmente para su festival como es el caso de Los Niños de los Ojos Rojos, con quienes aún no ha firmado el contrato de Extremúsika, según asegura Casado.

Desde luego este tipo de guerras sin sentido a los únicos que perjudican son a los músicos, representantes de los grupos y sobre todo al público, que a lo mejor se queda sin poder ver a sus bandas favoritas por estas injustificadas rencillas, envidias y políticas empresariales de las grandes productoras venidas de Madrid, manipuladas a su vez por los políticos de turno. Que hace tiempo que llevan a esta tierra hacia la más completa desolación.

Aquí no vamos a entrar en la otra batalla de si AVallekas dejó tirado al propagandista ayuntamiento de Cáceres o si consiguió condiciones más ventajosas con su homólogo emeritense. Lo que está claro es que esto debe ser una sana competencia entre ayuntamientos, empresas y grupos. Y Avallekas no debería vetar a los grupos y amenazarles con retirarles el contrato con Extremúsika si firman también con Krea Musika para el Festival del Oeste, porque no tiene ningún sentido más allá de la zafia competitividad o la envidia, pero sobre todo no tiene derecho a arruinar las aspiraciones de los grupos y las pequeñas productoras que les representan, por muy grande y prestigioso que se crean que es su festival, o por muy extremeños como dicen que se sienten.

Podríamos asegurar sin miedo a equivocarnos, que detrás de todo este embolao anda la paranoia propagandística de los degenerados zombies políticos extremeños del PSOE (y sus rivalidades y odios internos), que están al frente de estos dos ayuntamientos a la deriva y con deudas de hasta 120 millones de euros como es el caso del ayuntamiento de Cáceres. Y a los cuales parece ser que aparte de despilfarrar el dinero que no tienen, les encanta competir en este tipo de cuestiones y salpicar con su mierda al mayor número de ciudadanos y trabajadores posíble, pues Avallekas parece que rabia porque nunca ha recibido dinero por parte del ayuntamiento de Cáceres, que este año dará cerca de 800.000 mil euros para hacer el Festival del Oeste.

Y la crisis depedazándonos. El pan y el circo están más que servidos, los de siempre saldrán beneficiados y con un montón de billetes en sus bolsillos, y los pequeños, serán los que se coman toda su mierda ¿Hasta cuándo?

Seguiremos informando...

http://www.extremaduraprogresista.com/index.php?option=com_content&view=article&id=624:la-guerra-de-los-festivales-musicales-salvese-quien-pueda&catid=44:letras&Itemid=63

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ya en los 80 este personajillo, Ángel Vallekas, que era en sí mismo un lameculos del manager Jesús Caja, intentó dividir el Rock estatal, desprestigiando a los grupos que manageaba Javier Gálvez, su competidor o rival o como queramos llamarle. Este fantochillo de poca monta venido a más ha hecho mucho daño al rockandroll y veo que no ha evolucionado nada. Y teníais que haberle visto con mallas, era más que grotesco...