Según fuentes cercanas, se están dando despidos improcedentes, irregularidades democráticas y mobbing contra ciudadanos y políticos que se oponen a los defectuosos y peligrosos proyectos eólicos que se preparan para Extremadura y que ya han terminado su período de exposición pública (en segunda ronda tras el rechazo absoluto de la Junta a los que se presentaron en primer lugar por no cumplir las exigencias medio ambientales). Bien escandalosos debían ser para que no los aprobaran, o porque a lo mejor no los presentaba Gallardo.En círculos cercanos ya se critica a políticos, a empresas y fundaciones implicadas como la sociedad aceitunera Acenorca o la Fundación Santos de Maimona, que participarán como accionistas en los proyectos liderados por EUFER (Enel, una compañía italiana, y Unión Fenosa). También se comenta: la dudosa fiabilidad de los puestos de trabajo prometidos por megavatio generado, la no alusión al impacto medioambiental de los nuevos tendidos eléctricos y accesos a los molinos, la creación de empresas adyacentes, y las ayudas que van a recibir de todos los extremeños, digo de la Junta..., en fin, un sin número de despropósitos económicos, políticos y medioambientales, que son ya un clásico entre los ceporros de nuestra administración (con más ambición que ideas como le gustan a los gerifaltes socialistas) y sus amigotes de los lobbys de la energía, la industria farmacéutica y demás monstruos capitalistas con un ansia infinita de poder y riqueza.
En la wikipedia se define muy bien esto que está pasando y no estamos sabiendo: "El acoso laboral, conocido asimismo como acoso moral, y muy frecuentemente a través del término inglés mobbing ('acosar', 'hostigar', 'acorralar en grupo'), es tanto la acción de un hostigador u hostigadores conducente a producir miedo o terror en el trabajador afectado hacia su lugar de trabajo, como el efecto o la enfermedad que produce en el trabajador. Esta persona o grupo de personas reciben una violencia psicológica injustificada a través de actos negativos y hostiles en el trabajo por parte de sus compañeros, subalternos (vertical ascendente) o superiores (vertical descendente o el tradicional boosing), de forma sistemática y recurrente, durante un tiempo prolongado, a lo largo de meses e incluso años. Lo que se pretende en último término con este hostigamiento, intimidación o perturbación es el abandono del trabajo por parte de la víctima o víctimas."
Extremadura es el momento de gritar. Tenemos la oportunidad de nuestra vida, de ser un ejemplo de convivencia y respeto al medio ambiente en todo el mundo y de no equivocarnos como lo han hecho tantos con el desarrollismo que ha fulminado el planeta en menos de un siglo y que tiene cegados y engañados a nuestros "responsables políticos". Si alguien no se ha dado cuenta es que está ciego. Aún estamos a tiempo de seguir siendo el jardín de Europa. Paremos esto de una vez.
Seguiremos informando .
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