lunes, 10 de noviembre de 2008

En defensa de la dignidad de los periodistas en los medios de comunicación digitales

La Asociación de Periodistas de Cáceres está contemplando con gran preocupación la proliferación de insultos, injurias y difamaciones que están teniendo lugar en los periódicos digitales, en los que las víctimas son periodistas que lo único que hacen es cumplir con su trabajo. Se están produciendo estas faltas y hasta delitos, casi a diario, en los medios de comunicación que permiten a los lectores comentar noticias sin identificarse de manera segura, con lo que se favorece el anonimato en el que se escudan algunos individuos para atacar a profesionales del periodismo.

Ante esta realidad, la Asociación de Periodistas de Cáceres pide a los medios de comunicación que extremen la vigilancia en los comentarios a las noticias que publican en internet, para que los periodistas no sean víctimas de esos ataques injustos. Se está dando el contrasentido de que en los periódicos escritos hay un gran control en todo lo que se publica para no ofender, incluso en las cartas al director; mientras que en las ediciones digitales parece que se practica el ‘todo vale’; cuando las empresas, ante algunos tribunales, podrían ser encontradas responsables de dar espacio a delincuentes.

Vista la gravedad de esta situación, y la urgencia en defender la dignidad de los trabajadores, la Asociación de Periodistas de Cáceres pide a sus asociados que sean víctimas de insultos, injurias y difamaciones en comentarios a sus trabajos en internet, que lo comuniquen a esta Asociación cuanto antes para denunciarlo en la Comisaría o en el Juzgado de Guardia. La Asociación de Periodistas de Cáceres correrá con los gastos que suponga representarlos en los tribunales.


La Junta Directiva de la Asociación de Periodistas de Cáceres


Nota del autor. Tan sólo tengo que añadir un comentario y basándonos en nuestra propia estadística donde la manipulación informativa está entre las mayores preocupaciones de los extremeños:
-por algo será

Alberto Casado Noviembre 2008

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